El sector salud; la mejor cura para la incertidumbre macro

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La inversión de las firmas de Private Equity en la industria de los servicios de la salud alcanzó un récord histórico en 2021 ($151B). Los buenos retornos de estas inversiones confirman la resiliencia de la industria ante la incertidumbre macroeconómica que nos persigue. La entrada de nuevas fuentes de capital intensifica la competencia y elevan las valoraciones. 

Pero ¿qué factores son los más determinantes para explicar el rendimiento superior observado en esta industria durante los últimos 20 años? 

Según el informe publicado por Bain – Global Healtcare Private Equity and M&A Report 2022– el retorno observado en la industria de los servicios de la salud entre los años 2000-2009 superó en 2 pp al obtenido en el resto de las industrias. Esta diferencia de rentabilidad se acentúa cuando la muestra se analiza entre los años 2010-2021, alcanzando los 6pp. Además, los cuartiles superior e inferior también superaron al del resto de las industrias. Por último, el porcentaje de transacciones con pérdida total de su valor en la industria healthcare se sitúa en un atractivo 2,9% (muy por debajo de la media del mercado). 

Pero ¿cómo consigue el healthcare entregar estos resultados? Históricamente, la rentabilidad observada en las transacciones de healthcare se ha visto influida principalmente por dos palancas de creación de valor: el crecimiento de las ventas y el arbitraje de múltiplos.  

La tasa de crecimiento compuesto interanual (CAGR) en estas operaciones asciende al 11,1% comparado con el 7,6% observado en el resto de la industria. La expansión internacional, el desarrollo de nuevas terapias/tecnologías y la adopción de modelos de atención avanzada son los principales motores que impulsan el crecimiento de las ventas.  

El arbitraje de múltiplos es la otra gran palanca de creación de valor, y se está produciendo a pesar de la inflación de múltiplos de los últimos años. El crecimiento de las ventas de las compañías las posiciona en un entorno de salida favorable, en el que el apetito y la competencia de las grandes farmacéuticas y laboratorios por absorber empresas de mediana capitalización aumenta su valoración.